RPC-263
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RPC-263 (2009). Imagen tomada a través de un vehículo de inmersión profunda reforzado con tungsteno equipado con una cámara térmica con lente de circonio.

Código de Fenómeno Registrado: 263

Clasificación del Objeto: Omega-Negro

Peligros: h-ecological.pngh-aggression.pngh-climatological.pngh-geological.pngPsychotronic.pngh-contact.png

h-explosive.pngh-extreme-temperature.pngh-mind-control.pngh-visual.png

Protocolos de Contención: La Autoridad debe asegurar la obtención continua de anomalías, cumpliendo con una cuota que se determina trimestralmente y sujeta a modificaciones repentinas por parte de la Junta de Directores Globales. La actividad sísmica dentro y alrededor del Monte Vesubio seguirá siendo una alta prioridad y en proporción directa a la duración entre sus erupciones.

Cuando los científicos de la Autoridad de la Tierra lo consideren necesario, se seleccionarán dos anomalías apropiadas (preferiblemente inanimadas) de la contención de la Autoridad y se transportarán al Monte Vesubio según la OPERACIÓN BLOQUE BLANCO. Existen protocolos de emergencia para acelerar los procesos de selección y entrega si es necesario.

Se permite que ocurran erupciones menores del Monte Vesubio que se prevé que produzcan solo humo si se reciben órdenes directas de los Directores Globales.

A partir del 18 de Marzo de 19441, los objetos anómalos de la Clase Alfa-Blanco ya no son candidatos suficientes para la OPERACIÓN BLOQUE BLANCO.


Descripción: RPC-263 es un objeto esférico de aproximadamente 5 metros de diámetro que está sumergido debajo del Monte Vesubio dentro del manto de la Tierra.

RPC-263 es capaz de soportar temperaturas superiores a 1250°C y probablemente esté construido con hierro, aunque no se puede descartar que el material sea de naturaleza anómala. RPC-263 tiene particiones de aproximadamente 1,5 metros de ancho en su capa exterior que permiten una visualización parcial en su interior. Un cubo hecho de un material similar está incrustado en el interior de RPC-263, sus vértices cruzan los marcos de estas particiones. Una celosía compleja de varillas más finas rodea la estructura; se desconoce el propósito de esta celosía fuera del refuerzo probable. RPC-263 se encuentra actualmente suspendido dentro de la astenosfera2.

RPC-263-A es una estructura humanoide dentro de RPC-263 que se asemeja al Hombre de Vitruvio3, y también está inscrito dentro de los parámetros del cubo y la esfera de la estructura.

RPC-263-B es la designación que se le da a cualquier columna piroclástica de humo, fragmentos de roca, magma y varias otras eyecciones expulsadas por el Monte Vesubio durante erupciones. Los desechos de las eyecciones de RPC-263-B contienen constantemente material genético humano. Este material genético ha sido cotejado con los descendientes vivos conocidos de [DATOS ELIMINADOS] (Ver Documento 263.GT-2019-FR - (NIVEL 4 CLASIFICADO)); las comparaciones genéticas con [DATOS ELIMINADOS] no están disponibles; dado el estilo de vida ascético del personaje histórico, es probable que no se reprodujera.

RPC-263-B exhibe un efecto de tracción sobre entidades anómalas conocidas. Cuando es observado por una conciencia o sapiencia anómala, RPC-263-B se considera un cognitopeligro de Clase III, de Segunda Orden4, y resultará en un comportamiento compulsivo que incluye intentos casi incesantes de disminuir la distancia entre la instancia anómala y el Monte Vesubio.

Historia y Descubrimiento: La Autoridad (entonces Auctoritas Impertus5) se enteró de RPC-263 a través de un miembro de la Orden de San Juan el Hesicast6. Este individuo, cuyo nombre se desconoce, inició el contacto con funcionarios de Auctoritas Impertus el 24 de Agosto de 1629 profetizando una erupción inminente y catastrófica del Monte Vesubio.

La Auctoritas Impertus había entrado en una relación de trabajo con la Orden de San Juan Hesicast en 1514, de modo que el PdI-26377 podría detenerse en su producción aparentemente a voluntad de artefactos, máquinas y entidades anómalas, que era tanto prolífica como inmanejable. Las Auctoritas Impertus hicieron numerosos intentos para confrontar y arrestar al PdI-263; sin embargo, todos fracasaron debido a contramedidas anómalas preparadas por PdI-263, quien anticipó las tácticas de estos intentos con relativa facilidad, lo que llevó a algunos a teorizar sus habilidades como deformadoras de la realidad (no confirmadas). Además, cada intento fallido aparentemente vigorizó la creatividad de PdI-263 para diseñar artefactos cada vez más refinados con fines de sabotaje; por lo tanto, la incidencia de ingeniería anómala deshonesta se exacerbó dada cada falla.

El hereje vio la frustración de nuestras maquinaciones contra él con las suyas propias, diabólicas en su construcción e inteligencia, era como si Dios mismo lo tuviera al tanto de nuestros planes y llegadas. Un día una trampa que arrebató a los hombres y los metió en un saco como harían con los granos de la cosecha; otro ensayo frustrado por una pared invisible, como si la Mano de Beelzebub estuviese deteniendo nuestro avance con cierto regocijo. Y mientras tanto, el brujo corchosa se nos escapa entre los dedos. ¡Este mismo día, se escapa a los Welken en un dragón de madera alado! Nuestros Señores están cada vez más cansados de estos esfuerzos infructuosos, vergonzosos como costosos. El hereje nos ha superado en todos sus caprichos; para él no somos más que juguetes.

- Adger Hatt, Auctoritas Impertus, Gran Poseedor, 1512

Se supo a través de la colección de textos abandonados que las intenciones y la inspiración de PdI-263 para la producción de artefactos anómalos fueron informadas por su teología, que buscaba dilucidar la unidad entre naturaleza/divino y el cuerpo humano. Así, la Orden de San Juan Hesicast fue reclutada por Auctoritas Impertus en un intento de intervenir por medios menos reactivos y más proactivos.

Lo siguiente es un relato escrito de una conversación desclasificada con respecto a esta proposición:


Al Auctoritas Impertus no se le concedió la cogestión del PdI-263 tras su matriculación en la Orden, ya que esta estipulación no estaba especificada en el pacto, ni estaba justificada espiritualmente por el código de ética de los monjes. Cada década, la Autoridad envió un representante para renegociar con el interés de establecer una contención más completa para el PdI-263, y también para catalogar cualquier invención anómala adicional. Las actividades posteriores, la salud y la vida útil del PdI-263 siguen sin verificar.


Apendice 263.1: En el año 1519, los reportes presentadas por agentes en las proximidades del Monte Vesubio registraron una actividad sísmica perturbadora. El análisis demostró un aumento del 400% en dicha actividad con respecto al año anterior. Los esfuerzos para comprender la repentina regulación al alza de esta actividad no tuvieron éxito.


Apéndice 263.2: Registro de la Entrevista - En 1629, el único miembro que quedaba de la Orden de San Juan el Hesicast se presentó ante la tercera arquidiócesis de Auctoritas Impertus en busca de asilo. Este individuo no quiso revelar su nombre "por vergüenza de pronunciarlo".

Su conversación con el arzobispo fue escrita y catalogada.


Apéndice 263.3: Aproximadamente dos años después de que tuvo lugar la entrevista anterior (1631), el Monte Vesubio experimentó una erupción masiva. La fuerza generada por la explosión abrevió el día en varias millonésimas de segundo y movió el Polo Norte en 2,5 cm. Numerosos pueblos quedaron cubiertos por corrientes de magma, matando a unas 3.000 personas. Las emisiones de esta erupción fueron tan extensas que la totalidad del sur de Europa quedó cubierta por los escombros, y la ceniza de Vesubio se descubrió en Constantinopla más tarde ese año (a 1.200 km de distancia).

En los meses siguientes, se observó que cientos de animales y personas individuales, de pueblos no afectados a una distancia de hasta 1,000 km, se congregaron en el volcán. Los que sobrevivieron a la subida al pico central invariablemente se arrojaron a las fauces del volcán y, presumiblemente, a la muerte en el magma de abajo.

Esta erupción marcó el inicio de una nueva etapa de actividad desde el Monte Vesubio; El comportamiento eruptivo se volvió casi constante. Para 1636, Auctoritas Impertus había comenzado a promulgar la OPERACIÓN BLOQUE BLANCO, y las erupciones posteriores (1660, 1682, 1694, 1698) fueron notablemente más contenidas con daños mínimos y sin pérdidas significativas de vidas.


Autor: ieatcrepesieatcrepes


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